Mágico tridente napolitano

En Italia hay un equipo de moda. Es celeste y no es la Lazio.

Esta temporada se le presenta al Nápoles una ocasión única para relevar a los equipos del norte en la posibilidad de optar al titulo de liga en el país transalpino. La ocasión la pintan calva.

A falta de catorce jornadas para la conclusión del campeonato el Milán lidera la clasificación con 49 puntos.

Sigue su estela el Nápoles con 46 y en tercer lugar el Inter con 44 y un partido menos.

En teoría, algunos de estos tres equipos se alzará con el titulo, sorpresas aparte, que todo puede pasar...

Los tres equipos siguen con su trabajo en Europa, los de Milán en Champions League y Nápoles en Europa League.

La escuadra napolitana posee un tridente de ensueño que le está dando muchas tardes de gloria a sus fanáticos tiffosis.

En San Paolo llevan unos muy buenos números. Es en su estadio donde deben hacerse fuertes para conseguir el objetivo por el que llevan soñando tanto tiempo.

La hegemonía de los equipos de Milán y de la Juventus es tal que han ganado 62 de los 106 títulos que se llevan disputados. Casi un 60% de los títulos en manos de tres equipos.

Por el bien del fútbol italiano, tan importante en el panorama europeo, debe abrirse el abanico de candidatos a la consecución del scudetto. Esto debe cambiar y ahora es el momento.

La época gloriosa en la historia del Nápoles fue a finales de los ochenta, cuando los celestes se alzaron con sus dos únicos titulos de Liga, en las temporadas 1986/87 y 1989/90 con Diego Armando Maradona al frente del equipo. La debacle del "Pelusa" hizo igualmente venirse abajo a los napolitanos, pasando tremendas penurias deportivas hasta hace relativamente poco tiempo, llegando a competir tres años en serie C1 tras descender por problemas financieros.

Pero corren buenos vientos en la ciudad del Vesubio.

Un equipo muy en forma y competitivo, bien dirigido desde la banda por Walter Mazzarri, ex entrenador de la Sampdoria de Génova. Exigente.

Cuenta en sus filas con tres de los mejores delanteros que puedan estar jugando en Italia en la actualidad. No tienen nada que envidiar a ninguno de los que compongan la mejor delantera de Italia. Ninguno es italiano.

Uruguayo, argentino y eslovaco. Edinson Cavani, Ezequiel Lavezzi y Marek Hamsik. De 25 años el segundo y de 23 los dos restantes. Un futuro prometedor, aunque difícil será que se mantengan los tres en el equipo la próxima temporada y el presente hay que aprovecharlo. Son conscientes de ello y van a por todo.

Los dos hispanoamericanos son delanteros centros natos, con olfato de felino, y una atracción por el gol que les vuelve locos, no en vano el artillero uruguayo va de máximo goleador con la nada despreciable cifra de 18 goles en liga.

Sin embargo, el eslovaco es un segunda punta, que puede jugar tanto por el centro como por la banda izquierda pero con sabia definición de cara a la portería. Este aniñado futbolista, no sólo surte de balones a los puntas, sino que además tiene gol, mucho gol.

Los tres tienen multitud de ofertas millonarias de gran parte de los equipos punteros de Europa y será complicadísimo que continúen juntos.

Si a esto unimos que en defensa tienen de central al solvente Paolo Cannavaro, hermano pequeño del gran Fabio, y al veterano Hugo Campagnaro podemos asegurar que han comprado muchas papeletas para que levanten el scudetto por tercera vez en su historia.

Será difícil, porque los rivales milanistas no son cojos, pero es la ocasión. Tiene que ser ahora, mañana será tarde.

Ganas no le faltan y talento, tampoco.

Se escribe con ene, con ene de Nápoles.